Después de superar los nervios en las practicas de conducir, ¿sigues experimentando ansiedad en tus desplazamientos diarios?, ¿ponerse al volante llega a ser un desafío? Esta situación no es infrecuente. Hasta el 22% de los conductores españoles convive con estrés y nerviosismo extremos, según el estudio ‘La ansiedad y su influencia en los conductores españoles’.

Los orígenes y causas de los nervios al volante son diversos: pueden estar motivados por la sensación de inseguridad (común entre los conductores noveles), la vivencia de episodios negativos (un accidente o la pérdida de un familiar en un siniestro vial, por ejemplo), la falta de hábito al volante o el desuso prolongado del vehículo. Sea cual sea su origen, en las siguientes líneas encontrarás la respuesta a cómo perder los nervios al conducir.

¿Cuáles son los mejores consejos para perder los nervios al conducir?

Conduce en condiciones y entornos favorables

No es lo mismo circular durante un día soleado por entornos familiares que hacerlo durante una noche lluviosa por carreteras extrañas (en este escenario, incluso los conductores más avezados experimentan inseguridad). Es importante sentirse cómodo al volante, y para ello lo más recomendable es limitar los desplazamientos a zonas geográficas conocidas y de escaso tráfico, hacerlo durante el día y siempre aprovechando el tiempo de ocio (hacerlo de camino al trabajo podría añadir sensación de urgencia o prisas).

Cuando logres habituarte a las condiciones favorables, desarrollando unos hábitos de conducción libres de estrés, es aconsejable ‘incrementar la dificultad’ de forma progresiva. Circular en condiciones climáticas adversas, por carreteras desconocidas o incluso después del ocaso añadirá unos niveles de presión extra que te permitirá poner a prueba tus nervios y combatirlos de manera eficaz. Desde luego, uno de los mejores consejos para perder los nervios al conducir de manera eficaz.

Selecciona al copiloto apropiado

Otra excelente respuesta a cómo perder los nervios al conducir es elegir al copiloto adecuado. Los desplazamientos en coche con niños pueden llegar a disfrutarse, especialmente en largas travesías, pero añaden una presión adicional, incompatible con aquellos conductores que experimenten un nerviosismo extremo o ansiedad al volante.

Sin embargo, esto no significa que conducir en solitario sea la mejor opción. De hecho, es preferible circular acompañado de una persona familiar, preferentemente de carácter tranquilo y sosegado, pues sabrán calmarnos en situaciones de estrés, como los embotellamientos de tráfico.

Planifica tu roadmap y establece objetivos atractivos

¿Otra respuesta a cómo calmar la ansiedad al conducir? Estableciendo una hoja de ruta y convirtiendo los desplazamientos en una pequeña aventura. Y es que la perspectiva de ponerse al volante para ir al trabajo no es igual de atractiva que hacerlo para disfrutar de una tarde de ocio y esparcimiento.

Anteriormente se ha mencionado que las prisas y la sensación de urgencia influyen negativamente en los conductores con ansiedad. De ahí que planificar la ruta a seguir sea una decisión acertada. Para hacerlo correctamente, es aconsejable no limitarse a organizar las paradas para descansar y tomar un ‘snack’, sino también evitar las rotondas difíciles, las autopistas con tráfico excesivo o las intersecciones que puedan generarnos inseguridad.

Entiende la raíz del problema

Desde un punto de vista psicológico, detrás de los nervios se encuentra el miedo. Esto sucede no sólo ante el desafío de conducir, sino ante cualquier circunstancia de la vida. En la mayoría de los casos, el temor es infundado, pero en el caso específico de los conductores, el miedo está más que justificado: en 2018 se produjeron 1.180 víctimas mortales en siniestros de tráfico, de manera que la perspectiva de accidentarse es aterradora para cualquier conductor.

Los conductores que experimenten ansiedad al volante deben comprender es que el miedo es una emoción, y la mejor forma de combatirla es utilizar la lógica y el sentido común. Existen infinidad de libros que ayudan a mentalizarte para disociar la conducción y los accidentes, como ‘SOS: Me da miedo conducir’ de Beatriz Dorrio Lourido, ‘Conducir sin miedo’ de Esteban Fernández o ‘Sin Miedo a Conducir’ de Omar Elshami. Este es uno de esos consejos para perder los nervios al conducir que deben trabajarse a diario con una mentalización adecuada.

Realiza cursos contra la amaxofobia

Con frecuencia los nervios al volante enmascaran un problema más grave conocido como amaxofobia o miedo a conducir. Se estima que 2 de cada 10 conductores españoles lo padecen, estando presente en un porcentaje significativo de los noveles, pues esta fobia no entiende de edades. De ahí que, en determinados casos, sea recomendable acudir a autoescuelas que dispongan de cursos específicos para combatir este problema. Autoescuela Abril, Autoescuela Chaparral, Autoescuela Lara, Autoescuela Gala y otros centros de formación vial disponen de programas adaptados a conductores con amaxofobia. En muchos casos, es indiferente que los clientes estén en posesión o no del permiso de conducir.

Con ayuda de estos consejos para perder los nervios al conducir, podrás reducir o eliminar este problema de manera eficaz y disfrutar así del placer de conducir. ¡Anímate! ¿Qué te han parecido estas recomendaciones? ¡Compártelo con nosotros!