Las infracciones de tráfico, ese toro que tarde o temprano nos pilla a todos, constituyen uno de los grandes temores entre motoristas y conductores. Este año la DGT preve una recaudación de 360 millones de euros, una cifra pavorosa donde las haya. Conducir bajo los efectos del alcohol, rebasar el límite de velocidad o ignorar determinadas normas de circulación son los principales motivos de sanción estos días. ¿Sabes cuántos puntos pierdes en estas y otras situaciones?
Con la entrada en vigor de la nueva ley de Seguridad Vial a principios de 2014, se ha incrementado la severidad de las multas, que pueden alcanzar los 1.000 euros y conllevar una ‘sangría’ importante de puntos en el carnet. Desde que se implantara este sistema en 2006, más de 177 mil personas han perdido su permiso de conducir. Los tipos de sanción —leves, graves y muy graves— comprenden un sinnúmero de sanciones.
Detenerse unos minutos en pasos de peatones, conducir con el carnet caducado, saltarse semáforos en ámbar o alertar a otros conductores son las principales faltas leves, que suponen multas de entre 100 y 200 euros, si bien rara vez llevan aparejadas la retirada de puntos.
Algo más rigurosas son las penalizaciones relativas al equipamiento. Prescindir del cinturón —o del casco, en los motoristas—, circular sin el alumbrado en condiciones o utilizar dispositivos móviles o la radio al volante conlleva sanciones de 300 euros y 3 puntos. También se ha tenido especial consideración con la seguridad de los más pequeños. Tanto es así, que se restan 2 puntos a quienes circulen con menores de 12 años como pasajeros de motocicletas.
No respetar las señales de stop y los semáforos en rojo tiene como consecuencia la pérdida de 4 puntos y 200 euros. La misma ‘medicina’ se aplica a los automovilistas que realicen maniobras peligrosas, ignoren la distancia de seguridad o arrojen objetos al asfalto, entre otros.
Infracciones que te costarán ‘un riñón’
El alcohol, determinadas negligencias o la picaresca de una minoría son los responsables de las sanciones más graves, una categoría con pocos apartados pero de gran contundencia. Los conductores que excedan el límite de alcohol en sangre o circulen bajo el efecto de las drogas y estupefacientes serán penados con 500 o 1.000 euros y la pérdida de 6 puntos en el carnet, sin mencionar la retirada del mismo durante tres meses. Algo más que un tirón de orejas, que también afecta a quienes eludan los radares mediante inhibidores.
En el panorama más gris, las sanciones pueden incluir de 6 a 12 meses de prisión en casos de conducción extremadamente temeraria, la participación en carreras ilegales, la conducción en sentido contrario o la negativa a someterse a controles de drogas o alcohol.
Recuperar los puntos perdidos es tan sencillo como seguir las indicaciones de la DGT o realizas cursos de sensibilización y reeducación vial. A diferencia de la opinión popular, tanto las multas como la recaudación de estas han disminuido en los últimos años, como prueba de la eficacia de estas medidas. Respetarlas es vital para ganar la batalla a la siniestralidad y mejorar la seguridad en nuestras carreteras. ¿Y tú, qué opinas de estas infracciones y sanciones?, ¿dirías que son justas y razonables? ¡Compártelo con nosotros!