El sector de la formación vial atraviesa por un momento de cambio e inestabilidad, motivado principalmente por el choque de los paradigmas tradicionales con las nuevas tecnologías y otros factores de fuerza mayor, como el declive de la natalidad o la creciente saturación de la oferta frente de una demanda insuficiente. No obstante, las crísis preceden siempre a los periodos de mayor prosperidad, y el futuro de las autoescuelas se encuentra, hoy más que nunca, en manos de las propias autoescuelas y de su capacidad de adaptación. Como quiera que sea, parece claro que la realidad aumentada, la enseñanza no presencial o la completa digitalización de sus gestiones se impondrán tarde o temprano en este sector. ¿Te atreverías a echar un vistazo al mañana?
La administración se digitalizará y automatizará
Si bien todos los sectores están plenamente informatizados, el de las autoescuelas continúa siendo una isla jurásica rodeada por un mar digital. En el mejor de los casos, los molestos registros informáticos del alumnado, siempre en desorden y muy desactualizados, son el pan de cada día para la mayoría de los centros, cuya evolución depende de aplicaciones como AutoescuelaPro, una plataforma accesible a profesores y administradores que concentra en un mismo espacio todas las gestiones del centro. Más allá del ahorro de tiempo y dinero que supone agilizar y automatizar todos sus procesos, estos avances les permitirán recoger grandes flujos de datos (Big Data), con los que entender los nuevos hábitos de consumo, adelantarse a sus competidores y, en suma, ofrecer un mejor servicio.
La realidad aumentada revolucionará la enseñanza vial…
El éxito de ‘Ingress’, ‘Pokémon Go’ o ‘Zombies, run!’ ha puesto la realidad aumentada en el punto de mira. La seguridad vial ya empieza a conquetear con esta tecnología, que también tendrá aplicaciones muy provechosas en el ámbito de la formación, complementando las lecciones del instructor y contribuyendo a reducir los percances e incidentes en clases prácticas, entre otros beneficios.
… o la realidad virtual sustituirá a las clases prácticas
Microsoft HoloLens, el popular Oculus Rift y otros cascos de realidad virtual tendrán incontables aplicaciones más allá del mundo del entretenimiento, como demuestra el simulador de conducción de Ford. Hablamos de una revolución en toda regla, que podría reemplazar antes de mediados de siglo a las lecciones prácticas, lo que supondría una mejora sustancial de la seguridad tanto para el alumno como para el examinador. Para entenderlo, debemos considerar que la ansiedad y los nervios pasan por su cenit durante las primeras horas al volantes, incrementado el riesgo de siniestralidad, lo que podría evitarse con esta novedosa tecnología. Así, el alumnado disfrutaría de un mayor número de horas al volante y gozaría de una mejor preparación antes de afrontar el examen práctico.
La enseñanza online sustituirá a las clases teóricas presenciales
Este escenario se encuentra a caballo entre el presente y el futuro de las autoescuelas, pues numerosos centros (Autoescuela Ayala, Hoy Voy, etc.) ya ofrecen esta modalidad a sus clientes. La comodidad, el ahorro de tiempo en desplazamientos, la mayor asequibilidad y otras ventajas de las autoescuelas online explican por qué, más pronto que tarde, acabarán generalizándose hasta sustituir las clases teóricas presenciales.
El coche autónomo provocará la desaparición de las autoescuelas
Último y más trágico escenario posible. Si el HAVEit de Volkswagen, el SARTRE de Volvo, el Urban Teammate de Toyota y otros sistemas de conducción autónoma tienen éxito y encuentran una óptima respuesta en el mercado, los hábitos del automovilista actual podrían cambiar para siempre tal y como los conocemos, llegando a desaparecer a mediados de siglo frente a la comodidad y seguridad de los coches autónomos. A todas luces, estamos ante una de las tecnologías más disruptivas de los últimos tiempos, que amenaza con empujar al abismo no sólo a las autoescuelas sino también a los transportistas, los taxistas y casi todos los profesionales tras el volante. Si piensas que todo lo anterior es ciencia ficción, te recomendamos echar un vistazo al proyecto ‘Future Bus’ de Mercedes-Benz o a la línea en pruebas RAC IntelliBus del Gobierno Australiano.
En vista de lo anterior, incontables rayos de luz pueden entreverse en el futuro de las autoescuelas, donde tampoco faltan sombras motivadas por los cambios de hábitos de consumo, como demuestra la amenaza de los vehículos sin conductor. Muchos de estos panoramas empiezan a cristalizar en nuestra realidad, y con el tiempo es muy probable que todos ellos, con mayor o menor exactitud, terminen por hacerse realidad. ¿Y tú, dirías que estos escenarios pueden suceder?, ¿cuál de ellos encuentras más probable? ¡Compártelo con nosotros!