Los amantes de la conducción pueden estar de enhorabuena, y no precisamente por el auge del coche autónomo. Las universidades de Tokyo, Portsmouth, Houston, Kentucky y California han desvelado una serie de efectos benéficos que la conducción ejerce sobre nuestra salud a todos los niveles. Y es que agilizar las funciones cerebrales, mejorar la capacidad de reacción, subir la autoestima e incluso retrasar el deterioro cognitivo están asociados a la conducción, de la que 26 millones de personas dependen en nuestro país. ¿Quieres descubrir estos y otros beneficios de conducir?
Conducir no es sólo ir del punto A al punto B. Competiciones como la Fórmula 1 y MotoGP o programas televisivos como ‘Top Gear’ demuestran que esta práctica es mucho más que eso, incluso para el ciudadano de a pie. Como descubriremos a continuación, conducir tiene un impacto altamente positivo sobre el ser humano, con beneficios a nivel físico, mental y emocional, y no por que lo digamos nosotros: lo dice la ciencia.
Conducir, una «medicina» con múltiples beneficios
En la última década, universidades de medio mundo han puesto la conducción en el punto de mira de sus investigaciones, desvelando los muchos beneficios asociados a su práctica diaria. ¡No te los puedes perder!
Agiliza las funciones cerebrales
En un estudio publicado en International Journal of Automotive Engineering, el Dr. Ryuta Kawashima, de la Universidad de Tokio (Japón), desveló el impacto positivo de utilizar la moto a diario sobre las funciones cognitivas. Pilotos en edades comprendidas entre los 40 y los 50 años mostraron una mejoría en el funcionamiento de su actividad cerebral tras dos meses de circulación. Para Kawashima las conclusiones son claras: utilizar este medio de transporte ayuda a nuestro cerebro a dar el 100%. Sin duda uno de esos beneficios de conducir a tener en cuenta antes de ponerse al volante.
Puede sustituir a la cafeína
Un curiosísimo estudio de la Universidad de Portsmouth (UK) analizó los efectos de la velocidad al volante sobre la adrenalina, determinando que eran similares a los producidos por 1-2 tazas café. Para establecer esta relación, Chris Wagstaff realizó una serie de pruebas al conocido ‘stuntman’ Niki Faulkner. A los mandos de un Mini JCW, se observó que su capacidad de reacción aumentaba un 6% con respecto a estados de reposo. En este sentido, incluso los copilotos parecían estar bajo los efectos de la cafeína.
Preserva la salud cognitva
Las funciones cognitivas experimentan un deterioro a partir de la tercera edad, motivo por el que numerosas voces aconsejan ‘limitar’ la conducción a los ancianos mayores de 65 años (que en España superan los 3,5 millones de usuarios). Recientemente un grupo de investigadores de las universidades de Kentucky y Virginia (EE.UU) han descubierto que unos hábitos activos de conducción contribuyen a frenar el deterioro de las funciones cognitivas (memoria, percepción, etc.) en personas de edad avanzada. Publicado en Psychologicalscience.org, esta investigación nos revela uno de los grandes beneficios de conducir.
Acentúa nuestro «sexto sentido»
El prestigioso Nature Scientific Reports se hizo eco en 2016 de las conclusiones de Ioannis Pavlidis, de la Universidad de Houston (EE.UU), y su estudio sobre el comportamiento de conductores sometidos a estados de estrés cognitivo, emocional y sensorial. 59 voluntarios y un simulador virtual de conducción fueron suficientes para determinar lo siguiente: existe «una especie de mecanismo en el cerebro», en palabras de Pavlidis, que nos ayuda a corregir posibles desviaciones en carretera, aunque nuestra mente esté pensando en cosas ajenas a la conducción (esto es, de forma inconsciente).
Mejora la confianza y autoestima
Especialmente en largos trayectos o desplazamientos regulares, los conductores deben circular con la espalda lo más vertical posible, para así evitar problemas lumbares. Pero además, un estudio de la universidad californiana de Marshall (EE.UU) descubrió que esta postura mejora la autoestima y determinación del ser humano. La investigación, que podemos encontrar en el Journal of Experimental Social Pyschology, afirma además que mantener la espalda recta nos fortalece a nivel psicológico.
Así, la conducción ejerce una incuestionable influencia positiva sobre la salud física, emocional y mental. Vale la pena mencionar que, lo que para unos es un placer, para otros puede suponer una pesadilla. Quienes experimenten grandes niveles de estrés y ansiedad al ponerse al volante podrían padecer amaxofobia, un síndrome poco común, que puede curarse con ayuda de estos consejos útiles. ¡Anímate! ¿Qué te han parecido estos beneficios? ¡Compártelo con nosotros!